Fallos de la Corte Internacional de la Haya brindan alivio a la comunidad raizal de San Andrés y Providencia

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En medio de la disputa entre Colombia y Nicaragua, la comunidad raizal de San Andrés y Providencia ha recibido un alivio en materia laboral con el reciente fallo de la Corte Internacional de la Haya. La corte rechazó las pretensiones de Nicaragua de extender su plataforma continental y declarar que las Islas de San Andrés y Providencia tienen una plataforma limitada, lo que habría afectado la generación de empleo en la región directamente.

El fallo ha sido recibido con gran alegría por la Ministra del Trabajo, Gloria Inés Ramírez Ríos, quien destacó su importancia en la protección de los trabajadores de la pesca en San Andrés. La ministra resaltó que este fallo devuelve la tranquilidad a los trabajadores y trabajadoras de la pesca en las islas y llamó a seguir adelante en los procesos de protección y generación de empleo. Además, celebró el pronunciamiento de la corte internacional, enfatizando la importancia de continuar con los procesos de formación laboral, incluyendo la certificación que se está llevando a cabo a través del SENA.

La decisión de la Corte Internacional de la Haya también fue destacada como un instrumento de gran valor para los procesos de capacitación y formación que se están desarrollando en San Andrés, Providencia y Santa Catalina. Se resaltó que el fallo protege a más de 10 mil trabajadores raizales de las islas y contribuye efectivamente a la reactivación económica que este territorio requiere.

El sector trabajo, a través de su dirección territorial en San Andrés, continúa con las acciones pertinentes para la reactivación del empleo y la formación para el trabajo. Se están llevando a cabo distintos programas que ofrece el Gobierno del Cambio para las Islas y sus habitantes, con el objetivo de seguir impulsando la generación de empleo y la reactivación económica en la región.

Este fallo de la Corte Internacional de la Haya marca un hito importante en la protección de los derechos laborales y el impulso a la reactivación económica en las Islas de San Andrés y Providencia. Con esta decisión, se brinda un alivio a la comunidad raizal y se abre paso a una mayor estabilidad y desarrollo en el ámbito laboral en la región.

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