Human Rights Watch (HRW) entregó este jueves el primero de una serie de informes sobre la situación que viven los migrantes al cruzar el Darién, la selva entre Colombia y Panamá. El documento de 58 páginas destaca los abusos, incluidos los de tipo sexual y el fortalecimiento del crimen organizado.
El reporte es un sumario de los hallazgos recogidos durante cuatro visitas a numerosas rutas en el Darién, entre abril de 2022 y junio de 2023, donde HRW entrevistó a unas 300 personas para documentar las causas y respuestas a la crisis migratoria, dice el informe.
Una de las conclusiones dice que Human Rights Watch obtuvo evidencias de que las restricciones al movimiento desde países sudamericanos hacia México y Centroamérica, a menudo promovidas por Estados Unidos, han contribuido a aumentar el número de personas que cruzan el Tapón del Darién.
El cruce del Darién es una odisea llena de peligros. Los migrantes se enfrentan a una selva inhóspita, plagada de serpientes venenosas, arduas condiciones climáticas, falta de alimentos y agua potable, y el acecho constante de bandas criminales. Además de estos riesgos naturales, los abusos a manos de traficantes y criminales son alarmantemente frecuentes. El informe de HRW destaca los abusos sexuales sufridos por las mujeres migrantes, quienes enfrentan una vulnerabilidad aún mayor en su viaje.
La falta de vías seguras y legales para migrantes en Sudamérica estaría motivando a los migrantes a emprender el peligroso camino a través de la selva del Darién, donde viven diferentes tipos de violencia. Las restricciones de movimiento desde países sudamericanos hacia México y Centroamérica, a menudo promovidas por Estados Unidos, han llevado a que un número creciente de personas busquen rutas alternativas para llegar a su destino final.
La crisis migratoria en América Latina ha alcanzado proporciones alarmantes en los últimos años, y el Darién se ha convertido en uno de los puntos más peligrosos de esta travesía. La falta de vías seguras y legales para migrantes continúa motivándolos a emprender el viaje a pesar de los riesgos mortales que enfrentan en el Darién.
El informe de HRW también destaca la necesidad de abordar las causas fundamentales de la crisis migratoria en lugar de simplemente imponer restricciones al movimiento de los migrantes. Es esencial que se establezcan vías seguras y legales para que los migrantes puedan buscar refugio y oportunidades en otros países sin poner sus vidas en peligro.
Los gobiernos de la región, en colaboración con la comunidad internacional, deben tomar medidas concretas para abordar esta crisis humanitaria. Esto incluye la inversión en programas de desarrollo que aborden las causas fundamentales de la migración y la creación de rutas seguras y legales para los migrantes. Además, es imperativo que se investiguen y se tomen medidas enérgicas contra los traficantes y criminales que explotan y abusan de los migrantes en su viaje.
El informe de HRW es un llamado de atención urgente para poner fin a los abusos sufridos por los migrantes en el Darién y para abordar la crisis migratoria de manera integral y humanitaria. La falta de vías seguras y legales no solo pone en peligro la vida de miles de personas, sino que también socava los principios fundamentales de los derechos humanos.
En conclusión, el informe de Human Rights Watch destaca la cruda realidad que enfrentan los migrantes al cruzar el Darién, resaltando los abusos sufridos y la falta de vías seguras y legales. La crisis migratoria en América Latina es un problema complejo que requiere una respuesta coordinada y humanitaria de los gobiernos y la comunidad internacional. La protección de los derechos humanos de los migrantes debe ser una prioridad, y se deben tomar medidas para abordar las causas fundamentales de la migración y garantizar rutas seguras y legales para aquellos que buscan una vida mejor.