CIUDAD DE MÉXICO, septiembre 21 (EL UNIVERSAL).- La periodista de renombre Anabel Hernández ha vuelto a sacudir el mundo editorial con su último libro, “Las señoras del narco: Amar en el infierno”. En esta obra, Hernández revela detalles sorprendentes sobre las relaciones entre celebridades de Televisa y Arturo Beltrán Leyva, líder del Cártel de los Beltrán Leyva. El libro plantea una nueva perspectiva sobre la intersección entre el entretenimiento y el mundo del narcotráfico en México.
En su polémico libro anterior, “Emma y las otras señoras del narco”, Anabel Hernández ya había explorado la conexión entre figuras públicas y el crimen organizado en México. Ahora, en “Las señoras del narco: Amar en el infierno”, la periodista profundiza aún más en este tema, destacando nombres como Celeste y Betty Monroe, dos mujeres que tuvieron relaciones con Arturo Beltrán Leyva.
Uno de los aspectos más intrigantes del libro es la mención del catálogo de actrices de Televisa en manos de Arturo Beltrán Leyva. Según Celeste, exmujer de este narco, tuvo acceso a este catálogo y llegó a intentar contratar a una de las actrices más cotizadas de la época, Paty Navidad. Este revelador detalle arroja luz sobre una faceta poco conocida de la relación entre el mundo del espectáculo y el narcotráfico en México.
El catálogo de actrices de Televisa siempre ha sido un tema de interés en la industria del entretenimiento mexicano. Esta casa productora ha sido cuna de numerosas estrellas y ha desempeñado un papel fundamental en la formación de la cultura popular del país. La revelación de que Arturo Beltrán Leyva tenía acceso a este catálogo plantea preguntas intrigantes sobre la dinámica entre el crimen organizado y la industria del espectáculo.
Paty Navidad, una de las actrices mencionadas en el libro, era en ese momento una de las figuras más destacadas de Televisa. Su inclusión en esta historia abre la puerta a una serie de interrogantes sobre su relación con Arturo Beltrán Leyva y cómo este tipo de conexiones podrían haber influido en su carrera en la industria del entretenimiento.
Betty Monroe es otra actriz cuyo nombre ha salido a la luz en relación con el libro de Anabel Hernández. La periodista revela que Monroe también tuvo alguna conexión con Arturo Beltrán Leyva. Este tipo de revelaciones ponen de manifiesto cómo el narcotráfico ha estado presente en diferentes esferas de la sociedad mexicana, incluyendo la farándula.
Anabel Hernández, conocida por su valiente periodismo de investigación en temas de narcotráfico y política, ha destapado una vez más la caja de Pandora con “Las señoras del narco: Amar en el infierno”. Su trabajo arroja luz sobre las complejas redes de relaciones que existen entre celebridades y figuras del crimen organizado en México. Además, plantea preguntas importantes sobre la responsabilidad de las instituciones y la sociedad en general en el combate contra el narcotráfico y la impunidad.
Este libro no solo es una obra de investigación periodística, sino también un llamado a la reflexión sobre la relación entre el poder, la fama y el crimen en México. La autora nos invita a mirar más allá de la superficie y a cuestionar lo que creíamos saber sobre las figuras públicas y su participación en el mundo del narcotráfico.
En resumen, “Las señoras del narco: Amar en el infierno” de Anabel Hernández es un libro que está destinado a generar debate y discusión en la sociedad mexicana. Sus revelaciones sobre el catálogo de actrices de Televisa y las conexiones entre celebridades y el narcotráfico plantean preguntas profundas sobre la cultura popular y la influencia del crimen organizado en México. Este libro es una llamada de atención para que todos reflexionemos sobre las complejidades de nuestra sociedad y lo que podemos hacer para combatir el narcotráfico y la impunidad que lo rodea.
